sábado, 19 de marzo de 2016

Nunca dejes de explorar

En espera del vuelo de mañana, entre algo de orden casero y la maleta, nada potable en la televisión, así que he escogido un vídeo casi al azar, un vídeo cuyo objetivo no era otro que pasar un rato practicando inglés. Endiablado idioma con el que ando de nuevo intentando dar un  salto hasta alcanzar un aceptable nivel que me permita al menos profundizar en la amistad con mis vecinos from NY.  

Una canción del pasado. Alucinante. Magistral John Travolta. Soberbia Scarlatett Johanssom. Completa el trío un joven que borda su papel. A quién no le guste el country y le deprima ese tipo de vida solitaria y desarraigada de la América profunda tal vez no se la recomendaría, o incluso también. Un motivo no desvelado hasta el final, no obstante, más allá de explicaciones, a pesar de desordenes y alcohol, a pesar de los pesares, se respira libertad, libertad y un hilo de esperanza gracias justamente a ese aire de libertad. "Never stop exploring. And at the end of the our exploring will be to arrive where we started"  de Eliot, resalta el protagonista mientras la recita como cierre de su particular círculo  vital.

Nunca dejes de explorar. Seguir aprendiendo, buscando, sin moverse o moviéndose, nuestro cerebro es una extraordinaria maquina abierta al mundo, a los idiomas, a nuevas experiencias, aprovechar el tiempo. Una importante bajada de sodio -sin de momento causa aclarada- por poco termina con todo un ejemplo de vida en lo que respecta a mil detalles, disfrutar de la gente y ser ella misma sin excesos de dependencia, envidiable virtud que implica libertad. Marcho esta semana de desconexión  y paseos, lecturas y aperitivos, mientras se recupera ya en una habitación. Suerte, mucha suerte y muchos años más.