jueves, 11 de junio de 2015

Neurólogos contra exorcistas


Nostalgia por el proyecto en común que no puedo ser… perplejidad  ante lo que te sucedió… alegría al verte recuperado… todo ello siento  mientras releo el  recién publicado artículo sobre tú caso clínico en el suplemento de la Vanguardia “Neurólogos contra exorcistas”,  De pesadilla. Uno entre un millón. Y, te tocó a ti, querido colega.

Atento, meticuloso, un diez como persona y médico. Te acababas de incorporar a mí equipo; los dos de la misma promoción, cada uno aportando lo nuestro; Centro de Especialidades Neurológicas; una realidad en marcha. Pasado unos meses, de un día para otro; raro, huidizo, despistado. Y, de repente, el delirio.

Pruebas y más pruebas. Los cuadros agudos de trastorno de conducta en una persona entrada  la cuarentena sin antecedentes de enfermedad mental apuntan hacia una causa orgánica. Desde tumores en las áreas frontales y temporales a infecciones o encefalitis… un estudio exhaustivo que  resultó completamente normal. Y, mientras tanto, indispensable el tratamiento de tu cuadro de agitación, alucinaciones, alteración de la realidad; medicaciones para un supuesto brote psicótico. Fármacos que en las últimas décadas han mejorado en cuanto a  tolerancia, pero que  aún suelen provocar bastantes efectos secundarios a las dosis habituales para controlar el descontrol de una mente en pleno brote psicótico; un cuadro clínico de pesadilla. Esquizofrenia atípica: conclusión diagnóstica de tu cuadro clínico ante la normalidad de todas las pruebas realizadas. 
  
Menos mal, pasaron los meses, y, poco a poco, te fuiste recuperando; el pronóstico incierto, entre sombras… alguna esperanza: los brotes psicóticos tardíos pueden no repetirse, cierto consuelo superpuesto al miedo a no volver a ser el que eras. La espada de un nuevo brote  acechando tus días y futuro.

Y, después del calvario, te reincorporaste a tu plaza de hospital.  No así a nuestro proyecto; lógica precaución para evitar un exceso de trabajo. Pasado un tiempo, mientras asistías a una conferencia, un flash. La enfermedad que se estaba exponiendo, esa nueva enfermedad recién descubierta por el eminente colega de especialidad afincado en Estados Unidos el cual había venido a Barcelona  para divulgarla. !Esa enfermedad era la causante de lo que te había ocurrido! Enfermedad autoinmune que crea un anticuerpo contra unos receptores del cerebro llamados NMDA provocando una ENCEFALITIS  causante de la clínica manifestada como un brote psicótico.

Una punción lumbar es una prueba algo agresiva y te encontrabas ya recuperado, así que todo quedó en sospecha hasta que, meses después, tras un amago de un nuevo brote, en el estudio de tu líquido cefalorraquídeo se detectó ese recién descubierto anticuerpo. Diagnóstico confirmado. Encefalitis autoinmune. Y, en esta ocasión, el tratamiento fue al grano: una medicación especifica contra dicho anticuerpo que ataca a determinados receptores del cerebro. Un anticuerpo a descartar ante cualquier primer brote psicótico. No dejamos de aprender. Cuantos misterios por descubrir. "Neurólogos contra exorcistas"; buen artículo divulgativo, no se si me gusta el título, en todo caso, cualquier brote psicótico -de causa aclarada o no- debe mantenerse al margen de cuentos o misterios más allá de no saber más de lo que en la actualidad sabemos. Eso si, cada vez sabemos más, gran aportación, querido colega, un fuerte abrazo.  

El grito. Edvard Munch