domingo, 2 de abril de 2017

Recuperar energías


Me encontraba cansada. Un trimestre con extras en cuanto a  preocupaciones además de  mi rutina diaria que no es precisamente  un campo de rosas, por supuesto, sin pretender dramatizar. Extrañamente cansada. Desde hace años, mentalizada en la conveniencia de hacer ejercicio diario por salud más que por diversión como realizaba en tiempos pasados. Entre la moto y mi trabajo sedentario, el invierno, los imprevistos comentados; en todo el trimestre: algún paseo ocasional, ni una brazada a pesar de disfrutar nadando de modo especial. Resumiendo, exceso de mi habitual sobrepeso más o menos saludable y bien llevado y cansada hasta extremos preocupantes. 
Un alivio, mi  analítica.  Así pues, a ponerse en forma.  En esta ocasión escogí  la opción de  un centro especializado en la Costa Brava; paseo matutino, tratamientos corporales; masajes, algas, barro, cremas reductoras… gimnasia de espalda, chorros de agua, piscina. En mente, desconectar y de paso  darle un buen impulso  al libro que estoy escribiendo. Veinticuatro horas diarias para mí misma frente al esplendido mar de la Costa Brava fuera de temporada alta.
Magnifica elección. Eso sí, regreso a mi rutina de Barcelona habiendo apenas leído unas  cuantas páginas de los cinco libros con los que aterricé y ni una palabra escrita para el mío que se encuentra más o menos a medio camino. Eso sí,  de tanto relax y paseos bordeando el mar,  me ha surgido  alguna idea modestamente brillante sobre cómo enfrentarme al  tema en el que me encuentro inmersa; ahondar en el personaje de Gaudí; tarea de tiempo y lecturas, pues, mi intención no es únicamente nombrarlo como el protegido de mi antepasado y hablar exclusivamente de mi familia,  sino ir bastante más allá e informarme y reflexionar sobre la época que les tocó vivir, la relación entre ambos, la burguesía industrial con sus luces y sus sombras;  adentrarme en la obra y la personalidad de este personaje tan singular sobre el  que muy poco me había interesado hasta ahora a pesar de tenerlo metido hasta en la sopa -quizá por ello-. 

Magnifica elección y también  magnifica  suerte. La suerte de unos días de un sol esplendido, la suerte de encontrarme acompañada en la misma batalla de cuidados y salud con estupendas personas cada una con sus motivos y sobrepeso a corregir: veinte o dos kilos; amigas, parejas, sueltos; todos desconectados por unos días de nuestra vida y estrés. Magnífico resultado; todos nos vamos con menos  peso, mas ligeros y  más energía. Suerte con la salud,  los kilos y el regreso a los líos cotidianos queridos amigos.  



           



3 comentarios:

  1. Fantastico post isabel !GRACIAS , Y como ya sabes y te comente , un grandioso placer haberte conocido !

    ResponderEliminar
  2. besos Xavi, lo mismo digo, seguimos en contacto, un abrazo


    ResponderEliminar
  3. Gracias por las palabras de medico
    !!!Ya nos contaras, con más detalles, exactamente donde es ese maravilloso lugar donde te has metido, me alegro muchísimo de que que te hayan ido tan bién, unos días de relax y buenas costumbres.
    Nex time, avisa que me apunto, ahora estoy fuera, pero en cuanto llegue me meto de cabeza en ello !!! Todo será por la salud !!!

    ResponderEliminar